No caben dudas de que el mercado de las pickups es uno de los de mayor importancia en nuestro país. No solo por los volúmenes de venta (sumando todos los segmentos está cerca del 25% del total) sino porque aquí se suelen fabricar productos de calidad que se adaptan muy bien a nuestra extensa geografía, al punto que muchos vislumbran a la Argentina como un polo dedicado exclusivamente a la producción de camionetas.
En el escalón más alto de las chatas se encuentran las big size, aquellas que durante bastante tiempo apenas si tuvieron jugadores aquí (quizás la más representativa sea la RAM) pero que en los últimos años comenzó a tener una oferta más amplia y variada; entre ellas se encuentra la Chevrolet Silverado. Fabricada en los Estados Unidos, acá llega en dos versiones, la Z71 Trail Boss (pensada para el off-road) y la High Country (con un espíritu más rutero), que fue la que evaluamos.
Un lustro pasó desde que el moño anunció el regreso de la Silverado a nuestro país. En el medio, hubo restricciones a las importaciones, crisis cambiarias y demás descalabros económicos. Sin embargo, el viejo anhelo de los fanáticos de este modelo se concretó este verano, cuando por fin llegó a los concesionarios.
Largo: 5,915 mAncho sin/con espejos: 2,063/2,676 mAlto: 1,945 mDistancia entre ejes: 3,745 mDespeje: 274 mmCapacidad de carga: 716 kgCapacidad de remolque: 4128 kgCapacidad del tanque: 91 LNeumáticos: 275/60 R20″Peso bruto: 3221 kg
Y esta chata se ve imponente. Es que más allá de sus dimensiones (5,915 m de largo, 2,676 m de ancho con espejos, 1,945 m de alto y 3,745 m de distancia entre ejes) tiene elementos que colaboran a dar esa imagen robusta y amplia, casi avasallante. Por ejemplo, la trompa maciza con la parrilla enorme llena de cromados, los grandes faros (todas las luces son de LED) y las buenas tomas de aire.
Lateralmente realzan las voluminosas ruedas 275/60 montadas sobre llantas de 20″, los apliques cromados y los llamados Trailering Mirrors, o sea, los formidables espejos laterales que tienen forma vertical y que están divididos en dos: la parte de arriba es para ver el tránsito y la de abajo para monitorear lo que sucede con el remolque (si es que se cuenta con él). La realidad es que de tan grandes terminan siendo incómodos, pues sobresalen demasiado de la carrocería y obligan a estar calculando permanentemente los espacios para acomodar el vehículo; además, cuesta acostumbrarse a usarlos.
Atrás aparece un gran paragolpes metálico y resalta el grupo lumínico de renovado diseño.
Ofrece una capacidad de carga de 716 kg (1781 L) y puede remolcar hasta 4128 kg (los norteamericanos no son de llenar las cajas, sino que prefieren usar tráilers; de ahí que importa más el empuje que el volumen). Al respecto, la caja viene de serie recubierta con un protector plástico y el portón se abre y cierra de manera eléctrica.
Si bien es bastante alta, ingresar es muy sencillo ya que posee con estribos, que, además, son retráctiles (salen y se esconden debajo de la carrocería al abrir cualquier puerta). Una vez adentro, hallar la posición de manejo es igualmente fácil (las butacas delanteras y la columna de dirección tienen regulación eléctrica), el espacio tanto adelante como atrás es enorme (pueden viajar cinco adultos con comodidad) y la visibilidad es óptima gracias a las amplias superficies vidriadas (solo se ve un poco entorpecida, de nuevo, por los espejos laterales).
La calidad de materiales y terminaciones también es excelente y la distribución es la clásica de la marca, pero muy funcional para el conductor. Como ítems destacados están los amplios espacios de guarda (debajo de los asientos) y la ergonomía de los asientos.
Lo anterior es acompañado con un equipamiento completísimo y que está a un nivel superior. Incluye techo corredizo, cargador inductivo de celulares, climatizador trizona, butacas para el conductor y acompañante con ventilados y calefaccionados, tapizados en cuero ecológico, head-up display regulable en altura y que permite setear los datos, volante multifunción también calefaccionado, tablero completamente digital de 12,3″ lleno de opciones de información y programable a gusto, pantalla táctil de 13,4″ para comandar el sistema MyLink y que es compatible con Android Auto y Apple CarPlay, sistema Google Built-In incorporado (incluye Maps, Play, Assistant, etc.), wifi nativo, sistema de emergencia en viaje OnStar, audio Bose, cámara 360°, sensores de estacionamiento frontales y posteriores y mucho más.
Otro amplio listado de componentes encontramos en lo que hace a seguridad, pues incluye 6 airbags, frenos a discos ventilados en las cuatro ruedas con ABS y EBD, asistente de arranque y descenso en pendientes, controles de tracción y estabilidad, etcétera, y varias ADAS como indicador de presión de neumáticos, detector de peatones delantero y trasero, alertas de cambio de carril y de tráfico cruzado, control crucero adaptativo, frenado autónomo de emergencia, asistente para mantenimiento de carril y sistema de monitoreo de tráiler, entre otras.
Y algo más: cuando uno se cambia se carril sin poner el giro o está estacionando y se aproxima demasiado a un obstáculo, el asiento de la butaca comienza a vibrar para advertir al conductor.
Mucho poder
Como corresponde a toda chata norteamericana que se precie de tal, debajo del capot encontramos el bloque turbonaftero EcoTec3, con una disposición V8 con 32 válvulas y 5.4 L de cilindrada, que genera 360 CV a 5600 rpm y 53 kgm (519 Nm) de par a 4100 rpm, asociado a una transmisión automática de 10 marchas. La tracción es 4×4 desconectable, con reductora y bloqueo de diferencial trasero. Brinda, también, tres modos de manejo: Off-Road, Normal y Sport.
Se nota una comunión casi perfecta entre el impulsor y la AT, pues muestran una solvencia excepcional en cualquier circunstancia de manejo. Por ejemplo, en ciudad se lo siente suave y armonioso, y en ruta a 130 km/h constantes gira a 2000 rpm. Claro que si se lo empieza a exigir, el conjunto responde sin titubeos, con un empuje y una fuerza extraordinarias. Está claro que transmite muchas buenas sensaciones al volante. Asimismo, si bien como dijimos esta no es la variante pensada para el fuera de pista, no muestra fallas para moverse en cualquier terreno sin problema (tuvimos la oportunidad de manejarla en arena, barro y ripio y respondió excelente.
Motor: turbonafteroCilindros: V8Cilindrada: 5400 ccVálvulas: 32Potencia: 360 a 5800 rpmPar: 53 kgm a 3100 rpmCaja: automática de 10 marchasTracción: 4x4Dirección: asistida eléctricamente
Pese a su tamaño y peso (3221 kg), manifiesta un comportamiento dinámico sólido, con mucha tenida y firmeza tanto en rectas como en curvas.
Y todo lo anterior lo corona con un confort de marcha estupendo, que invita a sacarla a la ruta y disfrutarla durante muchos kilómetros sin sentirla en el cuerpo (como puede pasar con otras camionetas).
Los consumos son bastante lógicos: en ruta a 130 km/h constantes demandó 14,3 L/100 km, mientras que en ciudad esos valores treparon a 17,2 L/100 km. Esto se relaciona con que el motor cuenta con un sistema de desactivación de cilindros, que permite funcionar con 4, 6 u 8 cilindros (dependiendo de la situación) cuando se circula a velocidades constantes. El tanque es de 91 L, con lo que la autonomía promedio es cercana a los 600 km.
En cuanto a la performance, acelera de 0 a 100 km/h en 6,5 segundos, recupera 80 a 120 km/h en 5,3 y la velocidad máxima está limitada a 183 km/h. El precio sugerido al público es de $110.671.900.
No caben dudas de que el mercado de las pickups es uno de los de mayor importancia en nuestro país. No solo por los volúmenes de venta (sumando todos los segmentos está cerca del 25% del total) sino porque aquí se suelen fabricar productos de calidad que se adaptan muy bien a nuestra extensa geografía, al punto que muchos vislumbran a la Argentina como un polo dedicado exclusivamente a la producción de camionetas.
En el escalón más alto de las chatas se encuentran las big size, aquellas que durante bastante tiempo apenas si tuvieron jugadores aquí (quizás la más representativa sea la RAM) pero que en los últimos años comenzó a tener una oferta más amplia y variada; entre ellas se encuentra la Chevrolet Silverado. Fabricada en los Estados Unidos, acá llega en dos versiones, la Z71 Trail Boss (pensada para el off-road) y la High Country (con un espíritu más rutero), que fue la que evaluamos.
Un lustro pasó desde que el moño anunció el regreso de la Silverado a nuestro país. En el medio, hubo restricciones a las importaciones, crisis cambiarias y demás descalabros económicos. Sin embargo, el viejo anhelo de los fanáticos de este modelo se concretó este verano, cuando por fin llegó a los concesionarios.
Largo: 5,915 mAncho sin/con espejos: 2,063/2,676 mAlto: 1,945 mDistancia entre ejes: 3,745 mDespeje: 274 mmCapacidad de carga: 716 kgCapacidad de remolque: 4128 kgCapacidad del tanque: 91 LNeumáticos: 275/60 R20″Peso bruto: 3221 kg
Y esta chata se ve imponente. Es que más allá de sus dimensiones (5,915 m de largo, 2,676 m de ancho con espejos, 1,945 m de alto y 3,745 m de distancia entre ejes) tiene elementos que colaboran a dar esa imagen robusta y amplia, casi avasallante. Por ejemplo, la trompa maciza con la parrilla enorme llena de cromados, los grandes faros (todas las luces son de LED) y las buenas tomas de aire.
Lateralmente realzan las voluminosas ruedas 275/60 montadas sobre llantas de 20″, los apliques cromados y los llamados Trailering Mirrors, o sea, los formidables espejos laterales que tienen forma vertical y que están divididos en dos: la parte de arriba es para ver el tránsito y la de abajo para monitorear lo que sucede con el remolque (si es que se cuenta con él). La realidad es que de tan grandes terminan siendo incómodos, pues sobresalen demasiado de la carrocería y obligan a estar calculando permanentemente los espacios para acomodar el vehículo; además, cuesta acostumbrarse a usarlos.
Atrás aparece un gran paragolpes metálico y resalta el grupo lumínico de renovado diseño.
Ofrece una capacidad de carga de 716 kg (1781 L) y puede remolcar hasta 4128 kg (los norteamericanos no son de llenar las cajas, sino que prefieren usar tráilers; de ahí que importa más el empuje que el volumen). Al respecto, la caja viene de serie recubierta con un protector plástico y el portón se abre y cierra de manera eléctrica.
Si bien es bastante alta, ingresar es muy sencillo ya que posee con estribos, que, además, son retráctiles (salen y se esconden debajo de la carrocería al abrir cualquier puerta). Una vez adentro, hallar la posición de manejo es igualmente fácil (las butacas delanteras y la columna de dirección tienen regulación eléctrica), el espacio tanto adelante como atrás es enorme (pueden viajar cinco adultos con comodidad) y la visibilidad es óptima gracias a las amplias superficies vidriadas (solo se ve un poco entorpecida, de nuevo, por los espejos laterales).
La calidad de materiales y terminaciones también es excelente y la distribución es la clásica de la marca, pero muy funcional para el conductor. Como ítems destacados están los amplios espacios de guarda (debajo de los asientos) y la ergonomía de los asientos.
Lo anterior es acompañado con un equipamiento completísimo y que está a un nivel superior. Incluye techo corredizo, cargador inductivo de celulares, climatizador trizona, butacas para el conductor y acompañante con ventilados y calefaccionados, tapizados en cuero ecológico, head-up display regulable en altura y que permite setear los datos, volante multifunción también calefaccionado, tablero completamente digital de 12,3″ lleno de opciones de información y programable a gusto, pantalla táctil de 13,4″ para comandar el sistema MyLink y que es compatible con Android Auto y Apple CarPlay, sistema Google Built-In incorporado (incluye Maps, Play, Assistant, etc.), wifi nativo, sistema de emergencia en viaje OnStar, audio Bose, cámara 360°, sensores de estacionamiento frontales y posteriores y mucho más.
Otro amplio listado de componentes encontramos en lo que hace a seguridad, pues incluye 6 airbags, frenos a discos ventilados en las cuatro ruedas con ABS y EBD, asistente de arranque y descenso en pendientes, controles de tracción y estabilidad, etcétera, y varias ADAS como indicador de presión de neumáticos, detector de peatones delantero y trasero, alertas de cambio de carril y de tráfico cruzado, control crucero adaptativo, frenado autónomo de emergencia, asistente para mantenimiento de carril y sistema de monitoreo de tráiler, entre otras.
Y algo más: cuando uno se cambia se carril sin poner el giro o está estacionando y se aproxima demasiado a un obstáculo, el asiento de la butaca comienza a vibrar para advertir al conductor.
Mucho poder
Como corresponde a toda chata norteamericana que se precie de tal, debajo del capot encontramos el bloque turbonaftero EcoTec3, con una disposición V8 con 32 válvulas y 5.4 L de cilindrada, que genera 360 CV a 5600 rpm y 53 kgm (519 Nm) de par a 4100 rpm, asociado a una transmisión automática de 10 marchas. La tracción es 4×4 desconectable, con reductora y bloqueo de diferencial trasero. Brinda, también, tres modos de manejo: Off-Road, Normal y Sport.
Se nota una comunión casi perfecta entre el impulsor y la AT, pues muestran una solvencia excepcional en cualquier circunstancia de manejo. Por ejemplo, en ciudad se lo siente suave y armonioso, y en ruta a 130 km/h constantes gira a 2000 rpm. Claro que si se lo empieza a exigir, el conjunto responde sin titubeos, con un empuje y una fuerza extraordinarias. Está claro que transmite muchas buenas sensaciones al volante. Asimismo, si bien como dijimos esta no es la variante pensada para el fuera de pista, no muestra fallas para moverse en cualquier terreno sin problema (tuvimos la oportunidad de manejarla en arena, barro y ripio y respondió excelente.
Motor: turbonafteroCilindros: V8Cilindrada: 5400 ccVálvulas: 32Potencia: 360 a 5800 rpmPar: 53 kgm a 3100 rpmCaja: automática de 10 marchasTracción: 4x4Dirección: asistida eléctricamente
Pese a su tamaño y peso (3221 kg), manifiesta un comportamiento dinámico sólido, con mucha tenida y firmeza tanto en rectas como en curvas.
Y todo lo anterior lo corona con un confort de marcha estupendo, que invita a sacarla a la ruta y disfrutarla durante muchos kilómetros sin sentirla en el cuerpo (como puede pasar con otras camionetas).
Los consumos son bastante lógicos: en ruta a 130 km/h constantes demandó 14,3 L/100 km, mientras que en ciudad esos valores treparon a 17,2 L/100 km. Esto se relaciona con que el motor cuenta con un sistema de desactivación de cilindros, que permite funcionar con 4, 6 u 8 cilindros (dependiendo de la situación) cuando se circula a velocidades constantes. El tanque es de 91 L, con lo que la autonomía promedio es cercana a los 600 km.
En cuanto a la performance, acelera de 0 a 100 km/h en 6,5 segundos, recupera 80 a 120 km/h en 5,3 y la velocidad máxima está limitada a 183 km/h. El precio sugerido al público es de $110.671.900.
La Chevrolet Silverado es una de las referentes entre las big size. Confortable y con mucho equipamiento de seguridad, tiene una mecánica muy poderosa y óptimas capacidades off-road LA NACION