El Juego del Calamar y su jugador de acero 2024

El jugador y capitán de Platense, el defensor central Gastón Suso, se convirtió en el único jugador de campo de la Liga Profesional con asistencia perfecta y completa en todos los partidos que le tocó disputar convirtiéndose en ejemplo “para sus colegas, para juventud argentina y para los jugadores que superaron los 30 años que, por ahí, son vistos como adultos mayores dentro del fútbol”, según expresó conmovido un allegado a la dirigencia calamar. El dato es llamativo y sorprendente ya que la LPF 2024 tuvo 841 jugadores inscriptos y Suso es el único dentro de esa multitud de profesionales que completó los 27 partidos de su equipo sin ser sustituido con una suma total de 2.430 minutos.

Semejante rendimiento tuvo repercusiones puertas adentro de la AFA al punto que algunos dirigentes propusieron instituir el premio “Domingo F. Sarmiento a la presencialidad” para reconocer el compromiso de los jugadores que cumplen con todos los minutos de juego que asumen disputar desde el momento en que son designados titulares. Los argentinos que han pasado por la escuela primaria saben perfectamente que, como personaje histórico, el sanjuanino Sarmiento ganó imperecedera fama por no faltar a un día de clase durante toda su etapa como educando y, de ahí, la idea de darle su nombre a este reconocimiento “al presentismo en el fútbol”. “Sería como un Martín Fierro al presentismo” ejemplificó uno de los impulsores de la iniciativa.

“Estamos resolviendo el tamaño y las características de la estatuilla del Sarmiento, como así también el material que se empleará. No sabemos si hacerlas de alpaca o de uranio que tiene propiedades luminiscentes por la radiación, sabemos que esto no es muy saludable y puede producir mutaciones pero en la oscuridad produce un efecto muy bueno”, señaló un dirigente.

Cabe acotar que en el extremo opuesto a Suso se encuentra Spreem, de Deportivo Riestra, que ingresó como titular y sólo completó 10 segundos de juego neto antes de ser reemplazado por bajo rendimiento. “Fue tan fugaz su paso por el fútbol que no se pudo establecer qué puesto llegó a ocupar en la cancha durante su carrera”, se quejó con desconcierto uno de los cronistas a los que les tocó cubrir la totalidad de su trayectoria en el fútbol profesional, ya que se encontraba en ese partido Riestra-Vélez.

Pero el récord de Suso generó en el ambiente futbolero la pregunta de cómo sólo un jugador entre más de 800 logró la asistencia perfecta, acaso el capitán calamar es el “jugador de hierro” del que hablan algunos medios o el resto de los futbolistas de la Liga no tienen el aguante y la regularidad necesaria para completar cinco partidos consecutivos.

De acuerdo a la opinión de los analistas del fútbol (la mayoría de ellos personajes mediáticos que analizan el juego a grito pelado) para que un jugador titular se mantenga en el campo de juego 90 minutos necesita superar una serie de obstáculos, a saber: aguante físico (fundamental para no terminar los últimos minutos acalambrado dando evidentes muestras de dolor), evitar las lesiones durante el juego (algo difícil si hay jugadores como tipo Wilfred Singo en cancha), evitar las lesiones en los entrenamientos, lograr regularidad en el juego para zafar del cambio por bajo rendimiento, gambetear los temidos cambios tácticos, eludir el clamor de los hinchas para que el técnico lo saque del partido porque no da un pase como la gente o por supuesta falta de “actitud” (primero con murmullos, luego con silbidos al tocar la pelota y al final con referencias verbales más específicas), ser llamado a la selección para algún partido (todo es posible) y sortear las expulsiones o a veces las amarillas que condicionan.

Si todos estos elementos deben converger para que un jugador pueda terminar un partido lograr que confluyan a lo largo de 27 partidos constituye casi un prodigio. “Estamos hablando de un mérito extraordinario del jugador y de la ayuda de un fenómeno astronómico conocido como alineación planetaria”, reconoce el panelista futbolístico Carlos Atronador.

En general los que logran cumplir con todos los minutos en cancha durante una temporada son los arqueros, que si bien suelen tener bastante trabajo en algunos partidos corren menos riesgos que los jugadores de campo salvo cuando algún hincha rival de los que van a las cabeceras tiene suficiente puntería para impactarle con encendedores en los córners. “Estos hinchas son entrenados desde niños en el arte de arrojar encendedores a los arqueros y de adultos logran la precisión de un francotirador en sus lanzamientos” aseguró una fuente de seguridad. “Estamos trabajando en su erradicación” agregó. De hecho junto con Suso los otros jugadores que completaron todos los minutos disputados en la temporada 2024 fueron tres arqueros: Manuel Roffo, Diego Rodríguez y Rodrigo Rey.

Como se suele decir, es importante llegar a un lugar pero tan importante o más es mantenerse adonde se llegó. Suso es el ejemplo más representativo de ese enunciado en el resbaladizo día a día del fútbol argentino.

El jugador y capitán de Platense, el defensor central Gastón Suso, se convirtió en el único jugador de campo de la Liga Profesional con asistencia perfecta y completa en todos los partidos que le tocó disputar convirtiéndose en ejemplo “para sus colegas, para juventud argentina y para los jugadores que superaron los 30 años que, por ahí, son vistos como adultos mayores dentro del fútbol”, según expresó conmovido un allegado a la dirigencia calamar. El dato es llamativo y sorprendente ya que la LPF 2024 tuvo 841 jugadores inscriptos y Suso es el único dentro de esa multitud de profesionales que completó los 27 partidos de su equipo sin ser sustituido con una suma total de 2.430 minutos.

Semejante rendimiento tuvo repercusiones puertas adentro de la AFA al punto que algunos dirigentes propusieron instituir el premio “Domingo F. Sarmiento a la presencialidad” para reconocer el compromiso de los jugadores que cumplen con todos los minutos de juego que asumen disputar desde el momento en que son designados titulares. Los argentinos que han pasado por la escuela primaria saben perfectamente que, como personaje histórico, el sanjuanino Sarmiento ganó imperecedera fama por no faltar a un día de clase durante toda su etapa como educando y, de ahí, la idea de darle su nombre a este reconocimiento “al presentismo en el fútbol”. “Sería como un Martín Fierro al presentismo” ejemplificó uno de los impulsores de la iniciativa.

“Estamos resolviendo el tamaño y las características de la estatuilla del Sarmiento, como así también el material que se empleará. No sabemos si hacerlas de alpaca o de uranio que tiene propiedades luminiscentes por la radiación, sabemos que esto no es muy saludable y puede producir mutaciones pero en la oscuridad produce un efecto muy bueno”, señaló un dirigente.

Cabe acotar que en el extremo opuesto a Suso se encuentra Spreem, de Deportivo Riestra, que ingresó como titular y sólo completó 10 segundos de juego neto antes de ser reemplazado por bajo rendimiento. “Fue tan fugaz su paso por el fútbol que no se pudo establecer qué puesto llegó a ocupar en la cancha durante su carrera”, se quejó con desconcierto uno de los cronistas a los que les tocó cubrir la totalidad de su trayectoria en el fútbol profesional, ya que se encontraba en ese partido Riestra-Vélez.

Pero el récord de Suso generó en el ambiente futbolero la pregunta de cómo sólo un jugador entre más de 800 logró la asistencia perfecta, acaso el capitán calamar es el “jugador de hierro” del que hablan algunos medios o el resto de los futbolistas de la Liga no tienen el aguante y la regularidad necesaria para completar cinco partidos consecutivos.

De acuerdo a la opinión de los analistas del fútbol (la mayoría de ellos personajes mediáticos que analizan el juego a grito pelado) para que un jugador titular se mantenga en el campo de juego 90 minutos necesita superar una serie de obstáculos, a saber: aguante físico (fundamental para no terminar los últimos minutos acalambrado dando evidentes muestras de dolor), evitar las lesiones durante el juego (algo difícil si hay jugadores como tipo Wilfred Singo en cancha), evitar las lesiones en los entrenamientos, lograr regularidad en el juego para zafar del cambio por bajo rendimiento, gambetear los temidos cambios tácticos, eludir el clamor de los hinchas para que el técnico lo saque del partido porque no da un pase como la gente o por supuesta falta de “actitud” (primero con murmullos, luego con silbidos al tocar la pelota y al final con referencias verbales más específicas), ser llamado a la selección para algún partido (todo es posible) y sortear las expulsiones o a veces las amarillas que condicionan.

Si todos estos elementos deben converger para que un jugador pueda terminar un partido lograr que confluyan a lo largo de 27 partidos constituye casi un prodigio. “Estamos hablando de un mérito extraordinario del jugador y de la ayuda de un fenómeno astronómico conocido como alineación planetaria”, reconoce el panelista futbolístico Carlos Atronador.

En general los que logran cumplir con todos los minutos en cancha durante una temporada son los arqueros, que si bien suelen tener bastante trabajo en algunos partidos corren menos riesgos que los jugadores de campo salvo cuando algún hincha rival de los que van a las cabeceras tiene suficiente puntería para impactarle con encendedores en los córners. “Estos hinchas son entrenados desde niños en el arte de arrojar encendedores a los arqueros y de adultos logran la precisión de un francotirador en sus lanzamientos” aseguró una fuente de seguridad. “Estamos trabajando en su erradicación” agregó. De hecho junto con Suso los otros jugadores que completaron todos los minutos disputados en la temporada 2024 fueron tres arqueros: Manuel Roffo, Diego Rodríguez y Rodrigo Rey.

Como se suele decir, es importante llegar a un lugar pero tan importante o más es mantenerse adonde se llegó. Suso es el ejemplo más representativo de ese enunciado en el resbaladizo día a día del fútbol argentino.

 El jugador y capitán de Platense, el defensor central Gastón Suso, se convirtió en el único jugador de campo de la Liga Profesional con asistencia perfecta y completa en todos los partidos que le tocó disputar convirtiéndose en ejemplo “para sus colegas, para juventud argentina y para los jugadores que superaron los 30 años que, por ahí, son vistos como adultos mayores dentro del fútbol”, según expresó conmovido un allegado a la dirigencia calamar. El dato es llamativo y sorprendente ya que la LPF 2024 tuvo 841 jugadores inscriptos y Suso es el único dentro de esa multitud de profesionales que completó los 27 partidos de su equipo sin ser sustituido con una suma total de 2.430 minutos.Semejante rendimiento tuvo repercusiones puertas adentro de la AFA al punto que algunos dirigentes propusieron instituir el premio “Domingo F. Sarmiento a la presencialidad” para reconocer el compromiso de los jugadores que cumplen con todos los minutos de juego que asumen disputar desde el momento en que son designados titulares. Los argentinos que han pasado por la escuela primaria saben perfectamente que, como personaje histórico, el sanjuanino Sarmiento ganó imperecedera fama por no faltar a un día de clase durante toda su etapa como educando y, de ahí, la idea de darle su nombre a este reconocimiento “al presentismo en el fútbol”. “Sería como un Martín Fierro al presentismo” ejemplificó uno de los impulsores de la iniciativa.“Estamos resolviendo el tamaño y las características de la estatuilla del Sarmiento, como así también el material que se empleará. No sabemos si hacerlas de alpaca o de uranio que tiene propiedades luminiscentes por la radiación, sabemos que esto no es muy saludable y puede producir mutaciones pero en la oscuridad produce un efecto muy bueno”, señaló un dirigente.Cabe acotar que en el extremo opuesto a Suso se encuentra Spreem, de Deportivo Riestra, que ingresó como titular y sólo completó 10 segundos de juego neto antes de ser reemplazado por bajo rendimiento. “Fue tan fugaz su paso por el fútbol que no se pudo establecer qué puesto llegó a ocupar en la cancha durante su carrera”, se quejó con desconcierto uno de los cronistas a los que les tocó cubrir la totalidad de su trayectoria en el fútbol profesional, ya que se encontraba en ese partido Riestra-Vélez.Pero el récord de Suso generó en el ambiente futbolero la pregunta de cómo sólo un jugador entre más de 800 logró la asistencia perfecta, acaso el capitán calamar es el “jugador de hierro” del que hablan algunos medios o el resto de los futbolistas de la Liga no tienen el aguante y la regularidad necesaria para completar cinco partidos consecutivos.De acuerdo a la opinión de los analistas del fútbol (la mayoría de ellos personajes mediáticos que analizan el juego a grito pelado) para que un jugador titular se mantenga en el campo de juego 90 minutos necesita superar una serie de obstáculos, a saber: aguante físico (fundamental para no terminar los últimos minutos acalambrado dando evidentes muestras de dolor), evitar las lesiones durante el juego (algo difícil si hay jugadores como tipo Wilfred Singo en cancha), evitar las lesiones en los entrenamientos, lograr regularidad en el juego para zafar del cambio por bajo rendimiento, gambetear los temidos cambios tácticos, eludir el clamor de los hinchas para que el técnico lo saque del partido porque no da un pase como la gente o por supuesta falta de “actitud” (primero con murmullos, luego con silbidos al tocar la pelota y al final con referencias verbales más específicas), ser llamado a la selección para algún partido (todo es posible) y sortear las expulsiones o a veces las amarillas que condicionan.Si todos estos elementos deben converger para que un jugador pueda terminar un partido lograr que confluyan a lo largo de 27 partidos constituye casi un prodigio. “Estamos hablando de un mérito extraordinario del jugador y de la ayuda de un fenómeno astronómico conocido como alineación planetaria”, reconoce el panelista futbolístico Carlos Atronador.En general los que logran cumplir con todos los minutos en cancha durante una temporada son los arqueros, que si bien suelen tener bastante trabajo en algunos partidos corren menos riesgos que los jugadores de campo salvo cuando algún hincha rival de los que van a las cabeceras tiene suficiente puntería para impactarle con encendedores en los córners. “Estos hinchas son entrenados desde niños en el arte de arrojar encendedores a los arqueros y de adultos logran la precisión de un francotirador en sus lanzamientos” aseguró una fuente de seguridad. “Estamos trabajando en su erradicación” agregó. De hecho junto con Suso los otros jugadores que completaron todos los minutos disputados en la temporada 2024 fueron tres arqueros: Manuel Roffo, Diego Rodríguez y Rodrigo Rey.Como se suele decir, es importante llegar a un lugar pero tan importante o más es mantenerse adonde se llegó. Suso es el ejemplo más representativo de ese enunciado en el resbaladizo día a día del fútbol argentino.  La Voz

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