La tenista británica Katie Boulter, actual número 39 del ranking WTA, reveló en una entrevista con la BBC el costado más oscuro de su vida profesional: las constantes amenazas e insultos que recibe a través de redes sociales, en su mayoría provenientes de apostadores frustrados.
“Espero que tengas cáncer”, “Voy a mandar velas y un ataúd para tu familia”, o “Andate al infierno, perdí la plata que me mandó mi mamá” son apenas algunos de los mensajes que la jugadora compartió públicamente. Todos, enviados luego de partidos en los que los resultados no favorecieron a quienes apostaron.
“Esto demuestra lo vulnerables que somos, porque no sabés si la persona que te escribió está en el mismo lugar que vos o si sabe dónde vivís”, expresó Boulter, que viene de jugar en el torneo de Queen’s y esta semana compite en Nottingham.
“I hope you get cancer.”
No player should suffer social media abuse like this…
Tennis star Katie Boulter has shared some of the “disgusting” and “horrible” messages she regularly receives online.
The British number two says some threats leave her feeling “very vulnerabl pic.twitter.com/z5bN3ooOrB
— BBC Sport (@BBCSport) June 17, 2025
La tenista fue tajante al describir el impacto emocional que le generan estas situaciones: “Son cosas que no le diría ni a mi peor enemigo. Son horribles. Simplemente, horribles”, afirmó.
Según una investigación conjunta entre la WTA y la ITF, solo en 2024 se registraron cerca de 8.000 mensajes amenazantes dirigidos a jugadoras del circuito. El informe también detalla que el 40% de esos mensajes provinieron de apostadores.
La WTA cuenta con un canal de denuncia exclusivo para estos casos. En lo que va del año, 28 tenistas utilizaron el sistema para reportar 56 amenazas concretas. Sin embargo, muchas veces el abuso traspasa el plano digital: en el torneo de Miami, por ejemplo, un espectador fue expulsado tras insultar a Iga Swiatek, mientras que en Dubái, un hombre fue detenido y recibió una orden de restricción tras acosar a Emma Raducanu.
Boulter no es la única víctima, pero su testimonio expone una problemática creciente en el deporte profesional, donde la presión por el rendimiento ya no proviene solo de la competencia en cancha, sino también del escrutinio violento y muchas veces anónimo que acecha desde las redes.
La tenista británica Katie Boulter, actual número 39 del ranking WTA, reveló en una entrevista con la BBC el costado más oscuro de su vida profesional: las constantes amenazas e insultos que recibe a través de redes sociales, en su mayoría provenientes de apostadores frustrados.
“Espero que tengas cáncer”, “Voy a mandar velas y un ataúd para tu familia”, o “Andate al infierno, perdí la plata que me mandó mi mamá” son apenas algunos de los mensajes que la jugadora compartió públicamente. Todos, enviados luego de partidos en los que los resultados no favorecieron a quienes apostaron.
“Esto demuestra lo vulnerables que somos, porque no sabés si la persona que te escribió está en el mismo lugar que vos o si sabe dónde vivís”, expresó Boulter, que viene de jugar en el torneo de Queen’s y esta semana compite en Nottingham.
“I hope you get cancer.”
No player should suffer social media abuse like this…
Tennis star Katie Boulter has shared some of the “disgusting” and “horrible” messages she regularly receives online.
The British number two says some threats leave her feeling “very vulnerabl pic.twitter.com/z5bN3ooOrB
— BBC Sport (@BBCSport) June 17, 2025
La tenista fue tajante al describir el impacto emocional que le generan estas situaciones: “Son cosas que no le diría ni a mi peor enemigo. Son horribles. Simplemente, horribles”, afirmó.
Según una investigación conjunta entre la WTA y la ITF, solo en 2024 se registraron cerca de 8.000 mensajes amenazantes dirigidos a jugadoras del circuito. El informe también detalla que el 40% de esos mensajes provinieron de apostadores.
La WTA cuenta con un canal de denuncia exclusivo para estos casos. En lo que va del año, 28 tenistas utilizaron el sistema para reportar 56 amenazas concretas. Sin embargo, muchas veces el abuso traspasa el plano digital: en el torneo de Miami, por ejemplo, un espectador fue expulsado tras insultar a Iga Swiatek, mientras que en Dubái, un hombre fue detenido y recibió una orden de restricción tras acosar a Emma Raducanu.
Boulter no es la única víctima, pero su testimonio expone una problemática creciente en el deporte profesional, donde la presión por el rendimiento ya no proviene solo de la competencia en cancha, sino también del escrutinio violento y muchas veces anónimo que acecha desde las redes.
La tenista británica Katie Boulter, actual número 39 del ranking WTA, reveló en una entrevista con la BBC el costado más oscuro de su vida profesional: las constantes amenazas e insultos que recibe a través de redes sociales, en su mayoría provenientes de apostadores frustrados.“Espero que tengas cáncer”, “Voy a mandar velas y un ataúd para tu familia”, o “Andate al infierno, perdí la plata que me mandó mi mamá” son apenas algunos de los mensajes que la jugadora compartió públicamente. Todos, enviados luego de partidos en los que los resultados no favorecieron a quienes apostaron.“Esto demuestra lo vulnerables que somos, porque no sabés si la persona que te escribió está en el mismo lugar que vos o si sabe dónde vivís”, expresó Boulter, que viene de jugar en el torneo de Queen’s y esta semana compite en Nottingham.”I hope you get cancer.”No player should suffer social media abuse like this…Tennis star Katie Boulter has shared some of the “disgusting” and “horrible” messages she regularly receives online.The British number two says some threats leave her feeling “very vulnerabl pic.twitter.com/z5bN3ooOrB— BBC Sport (@BBCSport) June 17, 2025La tenista fue tajante al describir el impacto emocional que le generan estas situaciones: “Son cosas que no le diría ni a mi peor enemigo. Son horribles. Simplemente, horribles”, afirmó.Según una investigación conjunta entre la WTA y la ITF, solo en 2024 se registraron cerca de 8.000 mensajes amenazantes dirigidos a jugadoras del circuito. El informe también detalla que el 40% de esos mensajes provinieron de apostadores.La WTA cuenta con un canal de denuncia exclusivo para estos casos. En lo que va del año, 28 tenistas utilizaron el sistema para reportar 56 amenazas concretas. Sin embargo, muchas veces el abuso traspasa el plano digital: en el torneo de Miami, por ejemplo, un espectador fue expulsado tras insultar a Iga Swiatek, mientras que en Dubái, un hombre fue detenido y recibió una orden de restricción tras acosar a Emma Raducanu.Boulter no es la única víctima, pero su testimonio expone una problemática creciente en el deporte profesional, donde la presión por el rendimiento ya no proviene solo de la competencia en cancha, sino también del escrutinio violento y muchas veces anónimo que acecha desde las redes. La Voz