Omar De Felippe alcanzó un importante hito en su trayectoria al conquistar su primer título en la Primera División de Argentina. Central Córdoba de Santiago del Estero, bajo su dirección, se coronó campeón de la Copa Argentina tras vencer 1-0 a Vélez en el Estadio 15 de Abril de Unión de Santa Fe. Este triunfo histórico también aseguró al equipo un lugar en la próxima Copa Libertadores. De Felippe destacó el significado del logro: “Entramos en la historia de un club y una provincia muy humilde. Es una oportunidad de crecimiento para la institución”.
El técnico recordó que su experiencia previa en competencias internacionales será clave en esta nueva etapa para el equipo: “En su momento reemplacé a Gustavo (Quinteros) y dirigí dos Libertadores y una Sudamericana. También formé parte de la primera Libertadores de Banfield como ayudante de Julio (Falcioni)”.
A sus 62 años, De Felippe reflexionó sobre los sacrificios personales que vienen con el éxito profesional. En una emotiva entrevista con TyC Sports, ofreció disculpas a su hija por ausentarse en un momento especial: “No pude estar en su ceremonia de fin de curso, espero que me perdone. No podía dejar a los chicos solos ni un día. Este título es un gran premio, y ojalá que, aunque a la distancia, lo estén disfrutando”.
El entrenador también compartió cómo logró motivar al equipo: “Ayudamos a cambiar su mentalidad. Fue increíble. Comenzamos perdiendo contra Riestra, pero en cada partido demostraron coraje. Los chicos empezaron a encontrar el rumbo”.
Omar De Felippe alcanzó un importante hito en su trayectoria al conquistar su primer título en la Primera División de Argentina. Central Córdoba de Santiago del Estero, bajo su dirección, se coronó campeón de la Copa Argentina tras vencer 1-0 a Vélez en el Estadio 15 de Abril de Unión de Santa Fe. Este triunfo histórico también aseguró al equipo un lugar en la próxima Copa Libertadores. De Felippe destacó el significado del logro: “Entramos en la historia de un club y una provincia muy humilde. Es una oportunidad de crecimiento para la institución”.
El técnico recordó que su experiencia previa en competencias internacionales será clave en esta nueva etapa para el equipo: “En su momento reemplacé a Gustavo (Quinteros) y dirigí dos Libertadores y una Sudamericana. También formé parte de la primera Libertadores de Banfield como ayudante de Julio (Falcioni)”.
A sus 62 años, De Felippe reflexionó sobre los sacrificios personales que vienen con el éxito profesional. En una emotiva entrevista con TyC Sports, ofreció disculpas a su hija por ausentarse en un momento especial: “No pude estar en su ceremonia de fin de curso, espero que me perdone. No podía dejar a los chicos solos ni un día. Este título es un gran premio, y ojalá que, aunque a la distancia, lo estén disfrutando”.
El entrenador también compartió cómo logró motivar al equipo: “Ayudamos a cambiar su mentalidad. Fue increíble. Comenzamos perdiendo contra Riestra, pero en cada partido demostraron coraje. Los chicos empezaron a encontrar el rumbo”.
Omar De Felippe alcanzó un importante hito en su trayectoria al conquistar su primer título en la Primera División de Argentina. Central Córdoba de Santiago del Estero, bajo su dirección, se coronó campeón de la Copa Argentina tras vencer 1-0 a Vélez en el Estadio 15 de Abril de Unión de Santa Fe. Este triunfo histórico también aseguró al equipo un lugar en la próxima Copa Libertadores. De Felippe destacó el significado del logro: “Entramos en la historia de un club y una provincia muy humilde. Es una oportunidad de crecimiento para la institución”.El técnico recordó que su experiencia previa en competencias internacionales será clave en esta nueva etapa para el equipo: “En su momento reemplacé a Gustavo (Quinteros) y dirigí dos Libertadores y una Sudamericana. También formé parte de la primera Libertadores de Banfield como ayudante de Julio (Falcioni)”.A sus 62 años, De Felippe reflexionó sobre los sacrificios personales que vienen con el éxito profesional. En una emotiva entrevista con TyC Sports, ofreció disculpas a su hija por ausentarse en un momento especial: “No pude estar en su ceremonia de fin de curso, espero que me perdone. No podía dejar a los chicos solos ni un día. Este título es un gran premio, y ojalá que, aunque a la distancia, lo estén disfrutando”.El entrenador también compartió cómo logró motivar al equipo: “Ayudamos a cambiar su mentalidad. Fue increíble. Comenzamos perdiendo contra Riestra, pero en cada partido demostraron coraje. Los chicos empezaron a encontrar el rumbo”. La Voz