Qué pasa con San Isidro: el Halcón no pierde altura

El sueño de San Isidro de alcanzar la cima del básquet argentino sigue intacta. Y el haberse quedado a las puertas de haberlo consumado en la temporada que acabó, no aminoró el ánimo por seguir intentándolo en la próxima campaña.

Una muestra de ello fue la renovación de su cuerpo técnico, encabezado por Sebastián Porta, quien continuará el proceso de los “Halcones Rojos” por las venideras dos temporadas. Una apuesta fuerte para un club que lleva 14 años ininterrumpidos en la competencia del ascenso y que en 2019 también estuvo a un triunfo de alcanzar la Liga Nacional, sucumbiendo a manos de Platense.

En plena etapa de vacaciones, y en un largo paréntesis que recién acabará el 2 de noviembre cuando se largue la temporada 2025/2026, tanto dirigentes como cuerpo técnico trazan el bosquejo de lo que será la nueva versión del “Santo”, en la cual primará la idea de mantener a la mayoría del plantel que jugó las finales. Pero, también, ronda la intención de repatriar al neoyorquino Christopher Cooper, quien supo jugar dos temporadas en San Isidro, y cuyo último paso por el país fue en Regatas Corrientes.

En tren de asegurar la mayoría del último plantel, la dirigencia ya tiene muy avanzado las continuidades de Manuel Lambrisca, Nahuel Buchaillot y Jerónimo Suñé, quienes forman parte de la columna vertebral que conquistó el título Apertura de la pasada Liga Argentina.

“Seguir por este camino y volver a intentarlo”

Esta expresión, manifestada a La Voz por el entrenador sunchalense Sebastián Porta, resume la idea y el espíritu que acompañará el trabajo y el objetivo de San Isidro para su nuevo desafío.

Entre mate y mate, el ex alapivote y luego entrenador de Libertad de Sunchales, se presta a una charla donde desmenuza el porqué de su continuidad al frente del equipo cordobés, los planes y los deseos que acompañarán el nuevo proceso que comenzará por setiembre, con el arranque de la pretemporada.

-¿Cuáles fueron los factores que confluyeron para que se dé tu continuidad en San Isidro?

-Lo principal fue que las dos partes tuvimos el deseo de darle continuidad al trabajo. En lo que a mí respecta, tenía muchas ganas de continuar en la institución, de seguir con este trabajo que comenzamos hace un año. De volver a intentarlo. Y esas mismas ganas coincidieron con el grupo de dirigentes que comanda el básquet en San Isidro. Eso confluyó e hizo más fácil para que llegáramos a un acuerdo.

-¿Qué significa que hayas acordado un contrato por dos temporadas?

– Creo que es un voto de confianza enorme de la dirigencia para el cuerpo técnico. Por el trabajo realizado y, por sobre todo, para darle continuidad a lo que se viene realizando, con la idea de mantener una base de trabajo y de volver a apostar por el ascenso. Por mi parte, además de estar agradecido por el reconocimiento a este trabajo, donde los resultados mandan, habla a las claras de la responsabilidad absoluta para con el club desde el primer día que llegamos a San Francisco.

-¿Cuáles son los desafíos que se plantean para la temporada 2025/2026?

-Antes que nada hay que decir que la vara quedó muy alta. El haber llegado al último partido de la temporada jerarquiza el tránsito recorrido y lo que se hizo en el camino. Está claro de que a todos nos hubiese gustado terminar de otra manera, pero bueno, como siempre se dice ‘Hay lugar sólo para uno’ y por eso también hay que ser digno en la derrota. Racing fue el justo campeón, como lo hubiésemos sido nosotros en caso de que nos hubiese tocado. Dicho esto, a partir de este lugar, la idea es tratar de armar un equipo competitivo y serio, para tratar de volver a llegar, o al menos intentar, repetir lo realizado en la última temporada.

-¿Bajo qué criterios se conformará el nuevo plantel?

-Estamos trabajando con varias renovaciones. Hay varios acercamientos y supongo que en los próximos días habrá confirmaciones. Está claro que eso lo tiene que hacer el club antes que lo haga yo. La idea primordial, y que siempre se habló es que, si hay que hacer un cambio, que sea para mejorar y potenciar, pero siempre tratando de mantener la base en su gran mayoría. Siempre cuidando la armonía y el vestuario, que fue algo muy importante que tuvo el grupo y que lo llevó al lugar donde estuvo. Lo único claro es que tenemos hoy ocho fichas mayores, donde uno no tendrá lugar. A partir de ahí, buscaremos alguien que potencie o que mejore el equipo. Existe una gran posibilidad de volver a contar con un extranjero, siempre y cuando cuadre dentro de un presupuesto, que sirva para potenciar el equipo y que, si conoce el club y la categoría, mucho mejor.

-¿De acuerdo al perfil del nuevo equipo, ¿Qué impronta o características destacarán o querrás imprimirle para la nueva liga?

-No creo que haya demasiados cambios en cuanto a la estructura de juego y en cuanto a lo que pretendemos. Sobre todo si podemos mantener una base de jugadores para hacer la menor cantidad de cambios posibles. Los nuevos deberán adaptarse a lo que se viene haciendo, al grupo de trabajo, a la forma y a lo que pretendemos, que no variará mucho con respecto a la temporada pasada. Cuando me preguntan qué les faltó para coronar la temporada, siempre digo ‘Nada’. Solo ganar el último partido. Nada más. Si yo hablaría de alguna deficiencia estaría hablando indirectamente mal de los jugadores, que es algo que no me permito porque me han hecho vivir una temporada maravillosa y no tengo más palabras que agradecimiento. Lo único que nos faltó fue ganar el último partido de la temporada. Por eso no veo la necesidad de que tengamos que hacer muchos cambios, más que seguir por este camino y volver a intentarlo.

-¿El objetivo de máxima es el ascenso a Liga Nacional, o es apenas una de las opciones?

-El objetivo es tratar de armar el mejor equipo posible dentro del presupuesto del club, que es bueno. Ser protagonista, porque así lo requiere San Isidro, su grupo de trabajo donde, como te dije, la vara quedó muy alta. Por eso, tenemos la obligación desde el trabajo, desde el día a día, de tratar de volver a intentar de estar en el mismo lugar. Pero eso lleva mucho tiempo y mucho trabajo. Cambiará el formato del torneo, donde nuevamente serán treinta partidos, habrá muchas giras y donde en cuartos tendremos que cruzarnos con clubes de la otra zona. A priori, la idea y el objetivo es ser protagonistas. Queremos darnos una nueva oportunidad para volver a intentarlo.

El sueño de San Isidro de alcanzar la cima del básquet argentino sigue intacta. Y el haberse quedado a las puertas de haberlo consumado en la temporada que acabó, no aminoró el ánimo por seguir intentándolo en la próxima campaña.

Una muestra de ello fue la renovación de su cuerpo técnico, encabezado por Sebastián Porta, quien continuará el proceso de los “Halcones Rojos” por las venideras dos temporadas. Una apuesta fuerte para un club que lleva 14 años ininterrumpidos en la competencia del ascenso y que en 2019 también estuvo a un triunfo de alcanzar la Liga Nacional, sucumbiendo a manos de Platense.

En plena etapa de vacaciones, y en un largo paréntesis que recién acabará el 2 de noviembre cuando se largue la temporada 2025/2026, tanto dirigentes como cuerpo técnico trazan el bosquejo de lo que será la nueva versión del “Santo”, en la cual primará la idea de mantener a la mayoría del plantel que jugó las finales. Pero, también, ronda la intención de repatriar al neoyorquino Christopher Cooper, quien supo jugar dos temporadas en San Isidro, y cuyo último paso por el país fue en Regatas Corrientes.

En tren de asegurar la mayoría del último plantel, la dirigencia ya tiene muy avanzado las continuidades de Manuel Lambrisca, Nahuel Buchaillot y Jerónimo Suñé, quienes forman parte de la columna vertebral que conquistó el título Apertura de la pasada Liga Argentina.

“Seguir por este camino y volver a intentarlo”

Esta expresión, manifestada a La Voz por el entrenador sunchalense Sebastián Porta, resume la idea y el espíritu que acompañará el trabajo y el objetivo de San Isidro para su nuevo desafío.

Entre mate y mate, el ex alapivote y luego entrenador de Libertad de Sunchales, se presta a una charla donde desmenuza el porqué de su continuidad al frente del equipo cordobés, los planes y los deseos que acompañarán el nuevo proceso que comenzará por setiembre, con el arranque de la pretemporada.

-¿Cuáles fueron los factores que confluyeron para que se dé tu continuidad en San Isidro?

-Lo principal fue que las dos partes tuvimos el deseo de darle continuidad al trabajo. En lo que a mí respecta, tenía muchas ganas de continuar en la institución, de seguir con este trabajo que comenzamos hace un año. De volver a intentarlo. Y esas mismas ganas coincidieron con el grupo de dirigentes que comanda el básquet en San Isidro. Eso confluyó e hizo más fácil para que llegáramos a un acuerdo.

-¿Qué significa que hayas acordado un contrato por dos temporadas?

– Creo que es un voto de confianza enorme de la dirigencia para el cuerpo técnico. Por el trabajo realizado y, por sobre todo, para darle continuidad a lo que se viene realizando, con la idea de mantener una base de trabajo y de volver a apostar por el ascenso. Por mi parte, además de estar agradecido por el reconocimiento a este trabajo, donde los resultados mandan, habla a las claras de la responsabilidad absoluta para con el club desde el primer día que llegamos a San Francisco.

-¿Cuáles son los desafíos que se plantean para la temporada 2025/2026?

-Antes que nada hay que decir que la vara quedó muy alta. El haber llegado al último partido de la temporada jerarquiza el tránsito recorrido y lo que se hizo en el camino. Está claro de que a todos nos hubiese gustado terminar de otra manera, pero bueno, como siempre se dice ‘Hay lugar sólo para uno’ y por eso también hay que ser digno en la derrota. Racing fue el justo campeón, como lo hubiésemos sido nosotros en caso de que nos hubiese tocado. Dicho esto, a partir de este lugar, la idea es tratar de armar un equipo competitivo y serio, para tratar de volver a llegar, o al menos intentar, repetir lo realizado en la última temporada.

-¿Bajo qué criterios se conformará el nuevo plantel?

-Estamos trabajando con varias renovaciones. Hay varios acercamientos y supongo que en los próximos días habrá confirmaciones. Está claro que eso lo tiene que hacer el club antes que lo haga yo. La idea primordial, y que siempre se habló es que, si hay que hacer un cambio, que sea para mejorar y potenciar, pero siempre tratando de mantener la base en su gran mayoría. Siempre cuidando la armonía y el vestuario, que fue algo muy importante que tuvo el grupo y que lo llevó al lugar donde estuvo. Lo único claro es que tenemos hoy ocho fichas mayores, donde uno no tendrá lugar. A partir de ahí, buscaremos alguien que potencie o que mejore el equipo. Existe una gran posibilidad de volver a contar con un extranjero, siempre y cuando cuadre dentro de un presupuesto, que sirva para potenciar el equipo y que, si conoce el club y la categoría, mucho mejor.

-¿De acuerdo al perfil del nuevo equipo, ¿Qué impronta o características destacarán o querrás imprimirle para la nueva liga?

-No creo que haya demasiados cambios en cuanto a la estructura de juego y en cuanto a lo que pretendemos. Sobre todo si podemos mantener una base de jugadores para hacer la menor cantidad de cambios posibles. Los nuevos deberán adaptarse a lo que se viene haciendo, al grupo de trabajo, a la forma y a lo que pretendemos, que no variará mucho con respecto a la temporada pasada. Cuando me preguntan qué les faltó para coronar la temporada, siempre digo ‘Nada’. Solo ganar el último partido. Nada más. Si yo hablaría de alguna deficiencia estaría hablando indirectamente mal de los jugadores, que es algo que no me permito porque me han hecho vivir una temporada maravillosa y no tengo más palabras que agradecimiento. Lo único que nos faltó fue ganar el último partido de la temporada. Por eso no veo la necesidad de que tengamos que hacer muchos cambios, más que seguir por este camino y volver a intentarlo.

-¿El objetivo de máxima es el ascenso a Liga Nacional, o es apenas una de las opciones?

-El objetivo es tratar de armar el mejor equipo posible dentro del presupuesto del club, que es bueno. Ser protagonista, porque así lo requiere San Isidro, su grupo de trabajo donde, como te dije, la vara quedó muy alta. Por eso, tenemos la obligación desde el trabajo, desde el día a día, de tratar de volver a intentar de estar en el mismo lugar. Pero eso lleva mucho tiempo y mucho trabajo. Cambiará el formato del torneo, donde nuevamente serán treinta partidos, habrá muchas giras y donde en cuartos tendremos que cruzarnos con clubes de la otra zona. A priori, la idea y el objetivo es ser protagonistas. Queremos darnos una nueva oportunidad para volver a intentarlo.

 El sueño de San Isidro de alcanzar la cima del básquet argentino sigue intacta. Y el haberse quedado a las puertas de haberlo consumado en la temporada que acabó, no aminoró el ánimo por seguir intentándolo en la próxima campaña.Una muestra de ello fue la renovación de su cuerpo técnico, encabezado por Sebastián Porta, quien continuará el proceso de los “Halcones Rojos” por las venideras dos temporadas. Una apuesta fuerte para un club que lleva 14 años ininterrumpidos en la competencia del ascenso y que en 2019 también estuvo a un triunfo de alcanzar la Liga Nacional, sucumbiendo a manos de Platense.En plena etapa de vacaciones, y en un largo paréntesis que recién acabará el 2 de noviembre cuando se largue la temporada 2025/2026, tanto dirigentes como cuerpo técnico trazan el bosquejo de lo que será la nueva versión del “Santo”, en la cual primará la idea de mantener a la mayoría del plantel que jugó las finales. Pero, también, ronda la intención de repatriar al neoyorquino Christopher Cooper, quien supo jugar dos temporadas en San Isidro, y cuyo último paso por el país fue en Regatas Corrientes.En tren de asegurar la mayoría del último plantel, la dirigencia ya tiene muy avanzado las continuidades de Manuel Lambrisca, Nahuel Buchaillot y Jerónimo Suñé, quienes forman parte de la columna vertebral que conquistó el título Apertura de la pasada Liga Argentina.“Seguir por este camino y volver a intentarlo”Esta expresión, manifestada a La Voz por el entrenador sunchalense Sebastián Porta, resume la idea y el espíritu que acompañará el trabajo y el objetivo de San Isidro para su nuevo desafío.Entre mate y mate, el ex alapivote y luego entrenador de Libertad de Sunchales, se presta a una charla donde desmenuza el porqué de su continuidad al frente del equipo cordobés, los planes y los deseos que acompañarán el nuevo proceso que comenzará por setiembre, con el arranque de la pretemporada.-¿Cuáles fueron los factores que confluyeron para que se dé tu continuidad en San Isidro?-Lo principal fue que las dos partes tuvimos el deseo de darle continuidad al trabajo. En lo que a mí respecta, tenía muchas ganas de continuar en la institución, de seguir con este trabajo que comenzamos hace un año. De volver a intentarlo. Y esas mismas ganas coincidieron con el grupo de dirigentes que comanda el básquet en San Isidro. Eso confluyó e hizo más fácil para que llegáramos a un acuerdo.-¿Qué significa que hayas acordado un contrato por dos temporadas?- Creo que es un voto de confianza enorme de la dirigencia para el cuerpo técnico. Por el trabajo realizado y, por sobre todo, para darle continuidad a lo que se viene realizando, con la idea de mantener una base de trabajo y de volver a apostar por el ascenso. Por mi parte, además de estar agradecido por el reconocimiento a este trabajo, donde los resultados mandan, habla a las claras de la responsabilidad absoluta para con el club desde el primer día que llegamos a San Francisco.-¿Cuáles son los desafíos que se plantean para la temporada 2025/2026?-Antes que nada hay que decir que la vara quedó muy alta. El haber llegado al último partido de la temporada jerarquiza el tránsito recorrido y lo que se hizo en el camino. Está claro de que a todos nos hubiese gustado terminar de otra manera, pero bueno, como siempre se dice ‘Hay lugar sólo para uno’ y por eso también hay que ser digno en la derrota. Racing fue el justo campeón, como lo hubiésemos sido nosotros en caso de que nos hubiese tocado. Dicho esto, a partir de este lugar, la idea es tratar de armar un equipo competitivo y serio, para tratar de volver a llegar, o al menos intentar, repetir lo realizado en la última temporada.-¿Bajo qué criterios se conformará el nuevo plantel?-Estamos trabajando con varias renovaciones. Hay varios acercamientos y supongo que en los próximos días habrá confirmaciones. Está claro que eso lo tiene que hacer el club antes que lo haga yo. La idea primordial, y que siempre se habló es que, si hay que hacer un cambio, que sea para mejorar y potenciar, pero siempre tratando de mantener la base en su gran mayoría. Siempre cuidando la armonía y el vestuario, que fue algo muy importante que tuvo el grupo y que lo llevó al lugar donde estuvo. Lo único claro es que tenemos hoy ocho fichas mayores, donde uno no tendrá lugar. A partir de ahí, buscaremos alguien que potencie o que mejore el equipo. Existe una gran posibilidad de volver a contar con un extranjero, siempre y cuando cuadre dentro de un presupuesto, que sirva para potenciar el equipo y que, si conoce el club y la categoría, mucho mejor.-¿De acuerdo al perfil del nuevo equipo, ¿Qué impronta o características destacarán o querrás imprimirle para la nueva liga?-No creo que haya demasiados cambios en cuanto a la estructura de juego y en cuanto a lo que pretendemos. Sobre todo si podemos mantener una base de jugadores para hacer la menor cantidad de cambios posibles. Los nuevos deberán adaptarse a lo que se viene haciendo, al grupo de trabajo, a la forma y a lo que pretendemos, que no variará mucho con respecto a la temporada pasada. Cuando me preguntan qué les faltó para coronar la temporada, siempre digo ‘Nada’. Solo ganar el último partido. Nada más. Si yo hablaría de alguna deficiencia estaría hablando indirectamente mal de los jugadores, que es algo que no me permito porque me han hecho vivir una temporada maravillosa y no tengo más palabras que agradecimiento. Lo único que nos faltó fue ganar el último partido de la temporada. Por eso no veo la necesidad de que tengamos que hacer muchos cambios, más que seguir por este camino y volver a intentarlo.-¿El objetivo de máxima es el ascenso a Liga Nacional, o es apenas una de las opciones?-El objetivo es tratar de armar el mejor equipo posible dentro del presupuesto del club, que es bueno. Ser protagonista, porque así lo requiere San Isidro, su grupo de trabajo donde, como te dije, la vara quedó muy alta. Por eso, tenemos la obligación desde el trabajo, desde el día a día, de tratar de volver a intentar de estar en el mismo lugar. Pero eso lleva mucho tiempo y mucho trabajo. Cambiará el formato del torneo, donde nuevamente serán treinta partidos, habrá muchas giras y donde en cuartos tendremos que cruzarnos con clubes de la otra zona. A priori, la idea y el objetivo es ser protagonistas. Queremos darnos una nueva oportunidad para volver a intentarlo.  La Voz