Este sábado 21 de diciembre ocurre el solsticio de verano, un evento astronómico por el cual arranca la estación más calurosa en el hemisferio sur, incluida la Argentina. En lo esotérico, se considera que el inicio de la temporada más luminosa del año es ideal para intenciones de crecimiento, renovación y celebración. En ese sentido, muchas personas aprovechan para hacer algún ritual que les permita terminar el año recargados.
Ritual de agua y frutas
El solsticio es una buena oportunidad para revitalizar el cuerpo y la mente. Este ritual ayuda a purificarse y atraer la frescura, la vitalidad y la alegría que caracterizan al verano. Así se deja de lado todo lo que puede estancarnos y se termina el año con mayor ligereza y frescura.
Este ritual consiste en dejar el agua con fruta al sol para que absorba su energía y poder usarla para realizar esta limpieza. Para ello, se necesita un recipiente o jarra limpia (preferiblemente transparente para que absorba mejor la energía del sol), agua y frutas cítricas―naranja, limón o pomelo―.
Simplemente, hay que cortar la fruta en rodajas y colocarlas en el recipiente elegido con el agua. Estos se dejan al sol por unas horas en el exterior o debajo de una ventada por la cual los rayos del sol pasen. Al final del día, se puede utilizar el agua para lavarse las manos o refrescar su rostro. Durante este proceso, se puede decir: “Con esta agua solar, me purifico y lleno de la energía alegre del verano”. Otra opción es tomar el agua, siempre y cuando la fruta se haya mantenido fresca y el recipiente esté limpio.
Ritual de intenciones
A pocos días del inicio de un nuevo año, es una buena oportunidad para establecer metas claras y canalizar la energía del sol para cumplirlas. Las intenciones son una buena forma para organizar los pensamientos y deseos para poder lograrlos más adelante. Los materiales que se necesitan son papel, algo para escribir y encendedor o fósforos.
Este es el paso a paso para hacer este ritual de intenciones:
Escribir en el papel tres o cinco metas que desea lograr durante el próximo año. Debe ser en presente y en primera persona. Por ejemplo: “Deseo fortalecer mis relaciones personales.”Doblar el papel y colocarlo en un lugar donde reciba la luz del sol durante el día (puede ser cerca de una ventana o al aire libre).Una opción para liberarlo, se puede quemar el papel en un lugar seguro durante el atardecer. Al mismo tiempo, se debe agradecer al sol por la energía recibida.Si no se quiere quemar el papel, se puede guardar en un sitio significativo para después volver a buscarlo y ver si se cumplieron las intenciones.
Ritual con velas
Con este ritual se puede invocar claridad mental, creatividad y fortaleza para superar obstáculos. La vela ―que se recomienda que sea amarilla, blanca o naranja―actúa como un símbolo de iluminación y guía en el camino personal. Esta práctica además fomenta un momento de introspección que permite conectar con sus propios deseos y aspiraciones.
A continuación, el procedimiento que se debe seguir en este rito:
Encender la vela al mediodía, que es el momento en que el sol está en su punto más alto.Sentarse cerca de ella para observar su llama y pensar en la claridad, la creatividad o la energía positiva que se desea atraer.Decir en voz alta: ”Con esta luz, pido claridad y fortaleza para avanzar en mi camino.”Dejar que la vela se consuma sola o apagarla con cuidado.
Este sábado 21 de diciembre ocurre el solsticio de verano, un evento astronómico por el cual arranca la estación más calurosa en el hemisferio sur, incluida la Argentina. En lo esotérico, se considera que el inicio de la temporada más luminosa del año es ideal para intenciones de crecimiento, renovación y celebración. En ese sentido, muchas personas aprovechan para hacer algún ritual que les permita terminar el año recargados.
Ritual de agua y frutas
El solsticio es una buena oportunidad para revitalizar el cuerpo y la mente. Este ritual ayuda a purificarse y atraer la frescura, la vitalidad y la alegría que caracterizan al verano. Así se deja de lado todo lo que puede estancarnos y se termina el año con mayor ligereza y frescura.
Este ritual consiste en dejar el agua con fruta al sol para que absorba su energía y poder usarla para realizar esta limpieza. Para ello, se necesita un recipiente o jarra limpia (preferiblemente transparente para que absorba mejor la energía del sol), agua y frutas cítricas―naranja, limón o pomelo―.
Simplemente, hay que cortar la fruta en rodajas y colocarlas en el recipiente elegido con el agua. Estos se dejan al sol por unas horas en el exterior o debajo de una ventada por la cual los rayos del sol pasen. Al final del día, se puede utilizar el agua para lavarse las manos o refrescar su rostro. Durante este proceso, se puede decir: “Con esta agua solar, me purifico y lleno de la energía alegre del verano”. Otra opción es tomar el agua, siempre y cuando la fruta se haya mantenido fresca y el recipiente esté limpio.
Ritual de intenciones
A pocos días del inicio de un nuevo año, es una buena oportunidad para establecer metas claras y canalizar la energía del sol para cumplirlas. Las intenciones son una buena forma para organizar los pensamientos y deseos para poder lograrlos más adelante. Los materiales que se necesitan son papel, algo para escribir y encendedor o fósforos.
Este es el paso a paso para hacer este ritual de intenciones:
Escribir en el papel tres o cinco metas que desea lograr durante el próximo año. Debe ser en presente y en primera persona. Por ejemplo: “Deseo fortalecer mis relaciones personales.”Doblar el papel y colocarlo en un lugar donde reciba la luz del sol durante el día (puede ser cerca de una ventana o al aire libre).Una opción para liberarlo, se puede quemar el papel en un lugar seguro durante el atardecer. Al mismo tiempo, se debe agradecer al sol por la energía recibida.Si no se quiere quemar el papel, se puede guardar en un sitio significativo para después volver a buscarlo y ver si se cumplieron las intenciones.
Ritual con velas
Con este ritual se puede invocar claridad mental, creatividad y fortaleza para superar obstáculos. La vela ―que se recomienda que sea amarilla, blanca o naranja―actúa como un símbolo de iluminación y guía en el camino personal. Esta práctica además fomenta un momento de introspección que permite conectar con sus propios deseos y aspiraciones.
A continuación, el procedimiento que se debe seguir en este rito:
Encender la vela al mediodía, que es el momento en que el sol está en su punto más alto.Sentarse cerca de ella para observar su llama y pensar en la claridad, la creatividad o la energía positiva que se desea atraer.Decir en voz alta: ”Con esta luz, pido claridad y fortaleza para avanzar en mi camino.”Dejar que la vela se consuma sola o apagarla con cuidado. Este evento astronómico que da inicio a la estación más cálida del año trae una carga energética renovadora que se puedo aprovechar para terminar el 2024 recargado LA NACION